Google ha arreglado gran parte de la fragmentación en Android. Y no nos damos ni cuenta
Quizá las marcas de móviles y tablets nunca actualicen más allá de unos pocos años, pero Android tiene un potencial escondido para mantener más o menos al día lo más básico: el uso de aplicaciones. Google ha conseguido que utilizar un dispositivo con once años de antigüedad no sea un desastre, lo hemos comprobado en nuestra mítica Motorola Xoom, primera tablet con Android Henoycomb 3.0.
Android lleva arrastrando las actualizaciones limitadas para sus dispositivos casi desde su concepción, resulta poco común tener más de dos años de renovación garantizada. Y Google, pese a sus constantes intentos de remediar el problema, no logró solucionarlo. Eso sí, bajo el capó Android se mantiene mucho más actualizado de lo que parece, al menos lo justo para que usar los dispositivos siga siendo viable.